Ese paisaje o suma de vistas es parte de la calidad de vida de cada uno, al ser parte de la rutina, nos afecta positiva o negativamente, lo relevante es estar conciente de ello, para evaluar como está aportando a nuestra vida. Por mi parte tengo el privilegio de disfrutar de paisajes, vistas y panoramas hermosos todos los días.
A continuación una carretera (concesionada obvio, con portales para el tag más obvio) pero con la cordillera de Los Andes y el sol despuntado sobre ella, al fondo Santiago. Con suerte es posible ver el cerro San Cristóbal, la torre de Teléfonica y, con o sin suerte, se ve siempre el penacho de vapor que desprende la termo-eléctrica de Renca.
¿Qué mas se puede pedir?, ese es un "desayuno escénico" potente, vigorizante, no cabe duda.
Además, algo que no queda reflejado en las fotos son los olores a campo, a alfalfa, a tierra húmeda, a hierba dulce y tampoco los sonidos, los zorzales, tencas, codornices y gorriones, que cada mañana le ponen música a este panorama.
Lo siento si les da envidia, pero para los que tengan vocación, los invito a cambiarse a los suburbios.
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