miércoles, 24 de octubre de 2007

La Carnicería de Alto Jahuel

Es muy fácil recomendar la carnicería de alto Jahuel. Es atendida por Rubén Fernández, su actual dueño e hijo del antiguo dueño. Es un local muy sencillo y sobrio, pero la gracia está en los productos que vende y especialmente en la posibilidad de hacerse amigo de Rubén, eso implica la reserva de costillares, arrollados y demases.

Rubén elabora tal vez uno de los mejores arrollado huaso de la zona (de una zona muy amplia), es necesario reservarlos, pues como se ha corrido la voz, a estas alturas están muy sobredemandados. También vende perniles cocidos, chunchules, pollos asados en horno de barro los domingos.Tiene unas prietas muy buenas que según él fabrica una tía. Debe ser cierto, porque una vez me contó que las prietas de la semana las había hecho él y, perdonáme Rubén, se notaba que no las había cocinado tu tía.

Si es necesario para sus planes culinarios, puede pedirle a Rubén que le guarde un costillar entero de chancho (al horno de barro, 5 o 6 horas de cocción) o una pata del mismo animalito, a la que se le puede aplicar el mismo procedimiento. También se encuentran lenguas, chunchules, riñones y otras exquisites mata-arterias.

Además importa al Alto, dos productos cárneos que es obligación destacar, los corderitos del secano costero y las longanizas de San Carlos. Los corderos que vende Rubén son exquisitos, especiales para los meses de primavera, son de Marchigüe, Iloca o Lipimávida y, sin exagerar, le pegan tres chirlitos al mentado "cordero magallánico".

Las longanizas de San Carlos, vienen a medio ahumar y en se presentan en tiras de a lo menos 30 cms. de largo. Hay que preguntar cuando se vean colgadas atrás y reservarlas, hasta que estén bien secas, es decir oreadas y que hayan chorreado suficiente grasa. Aplicada esta táctica, quedan casi inigualables.

Gran valor Rubén y su establecimiento, los fines de semana y los "dieciocho" trabaja como loco, los días de semana se le puede ver al ponerse el sol, sentado fuera de su local en la Calle Miraflores al lado de la parroquia de Alto Jahuel.

Carnicería de Rubén Fernández, Calle Miraflores Nº 156, Alto Jahuel. Pedidos y reservas al fono 8219185.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Esas son las delicias de vivir fuera de la Metrópolo, conocer la gente, saber de su vida, conversar, más allá de un número para ser antendido, y rápido que viene el siguiente. Bien que haya alguien que rescate esta humanidad que a veces perdemos de vista.

Anónimo dijo...

Bien aguilucho con lentes, este es el tema, he tomado la foto como una provocación a mis fueguinos jugos gástricos, que cada vez que ven o siquiera presienten la imagen de un patagónico cuadrúpedo cubierto de tierna lana,se transforman en un depredador de pampas acoironadas, por lo tanto sin exagerar en recursos literarios ¿ Cuando nos comeremos a este animal????